Hace 4 años
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La Unión de los Amantes:
La pareja de pie cara a cara, el hombre frota su pene sobre la vulva de su pareja. Después de varios minutos de fricción, la vulva se abrirá naturalmente para permitir una penetración superficial. Si la mujer es de más pequeña estatura que el hombre, ella podrá agrandarse llevando zapatos de tacon o apoyándose sobre una guía telefónica por ejemplo (según sea la diferencia de estaturas).
Esta es una posición práctica realizable al imprevisto en cualquier situación, se experimenta una buena estimulación del clítoris y del glande; pese a que la penetración es superficial también es una posición susceptible al placer.
Bueno con este pequeño aporte ya tienen tarea para la semana, así que a practicar, practicar y practicar.
La pareja de pie cara a cara, el hombre frota su pene sobre la vulva de su pareja. Después de varios minutos de fricción, la vulva se abrirá naturalmente para permitir una penetración superficial. Si la mujer es de más pequeña estatura que el hombre, ella podrá agrandarse llevando zapatos de tacon o apoyándose sobre una guía telefónica por ejemplo (según sea la diferencia de estaturas).
Esta es una posición práctica realizable al imprevisto en cualquier situación, se experimenta una buena estimulación del clítoris y del glande; pese a que la penetración es superficial también es una posición susceptible al placer.
Bueno con este pequeño aporte ya tienen tarea para la semana, así que a practicar, practicar y practicar.
Alineación Perfecta:
La mujer se tumba sobre el hombre las piernas abiertas para facilitar la penetración. Una vez el pene bien asentado, ella aprieta las piernas para que los cuerpos de la pareja se superpongan en un alineación perfecta. La mujer puede entonces empezar la estimulación frotando su cuerpo lateralmente y horizontalmente contra el de su pareja.
Está es una posición muy intima, donde se ofrece un contacto máximo con la pareja; mientras que las paredes vaginales más apretadas favorecen sensaciones más intensas, sin duda esta posición resulta muy útil en el amor tántrico, sin embargo la profundidad de penetración y las amplitudes de movimiento quedan algo limitadas.
La mujer se tumba sobre el hombre las piernas abiertas para facilitar la penetración. Una vez el pene bien asentado, ella aprieta las piernas para que los cuerpos de la pareja se superpongan en un alineación perfecta. La mujer puede entonces empezar la estimulación frotando su cuerpo lateralmente y horizontalmente contra el de su pareja.
Está es una posición muy intima, donde se ofrece un contacto máximo con la pareja; mientras que las paredes vaginales más apretadas favorecen sensaciones más intensas, sin duda esta posición resulta muy útil en el amor tántrico, sin embargo la profundidad de penetración y las amplitudes de movimiento quedan algo limitadas.
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